¡Santiago ha sido invadido por seres que saltan más alto, que son más fuertes y que corren más rápido! No se alarme y tampoco crea que se trata de alienígenas o extraterrestres. Ellos son los representantes de los 14 países de 31 disciplinas que participan en los X Juegos Suramericanos 2014.
Una fiesta del deporte que por estos días engalana a nuestra capital y la que
se hizo en nuestro país por última vez en 1986. Recordará usted que en aquella
cita se consiguió el segundo
lugar continental y se mantuvo la posición de las dos versiones anteriores con
50 oros, 66 platas y 60 bronces. En la memoria del colectivo quedaron las
sobresalientes actuaciones de los atletas Mónica Regonesi, Pablo Squella y
Emilio Ulloa, del ciclista Miguel Droguett y del futbolista Ivo Basay. El
primer lugar fue para Argentina, con 80 medallas doradas.
El pueblo ha dicho presente en esta nueva versión de la justa deportiva
regional y se ha volcado en masa a los recintos y a las calles para apoyar a
los representantes criollos. Es así como la gimnasia de la mano de Tomás
González, llevó en cuatro días más de 25 mil espectadores. Asimismo, Barbara
Riveros, Kristel Köbrich y Gabriela Bruna celebraron sus medallas de oro con un
extraordinario marco de público. Esto
demuestra fehacientemente que el fútbol no lo es todo y que el público nacional
está ávido de eventos de esta envergadura.
Otro hito importante es que el deporte -no fútbol- después de un largo
tiempo, volvió a ser exhibido por la televisión abierta. Lamentablemente, la farandulización de los medios de
comunicación se ha apoderado de las parrillas programáticas y el deporte ha
sido uno de los grandes damnificados con esto. Disciplinas como la gimnasia, el
atletismo o la natación solo se pueden ver por cable o cada cuatro años con los
Juegos Panamericanos o con los Juegos Olímpicos. Esperemos que a partir de los
Juegos Suramericanos, diversas disciplinas vuelvan cada fin de semana -gratuitamente-
a los televisores de los hogares chilenos. Otrora era un panorama para la
familia ver un combate de boxeo, una carrera de ciclismo o un partido de
hockeypatín. Este puede ser uno de los primeros desafíos para la nueva
mandataria, para la nueva ministra del ramo y para los nuevos directores del
canal de todos.
Pese a la impecabilidad del torneo suramericano, las dos últimas jornadas
han estado marcadas por la polémica. El martes 11 de marzo la entrenadora del
equipo chileno Isabel Lazo, instó a la gimnasta peruana Mariana Chiarela -en un
curioso acto de “fair play”- a apelar
ante los jueces para corregir un fallo que hasta ese momento le daba la medalla
de plata a la gimnasta chilena Melany Cabrera en la viga de equilibrio. Como consecuencia
de esto, Chiarela se quedó con la medalla de plata y Cabrera con la medalla de
bronce. Cosas que solamente pasan en Chile.
El miércoles 12 de marzo, la ciclista chilena Irene Aravena se accidentó
gravemente cuando disputaba la medalla de bronce en la prueba de persecución.
La criolla no se percató de la partida falsa y chocó violentamente con un
partidor, quedando tendida en la pista del velódromo y gravemente herida. El
diagnóstico arrojó una fractura expuesta de rodilla y rótula. Tras ser operada,
la deportista se encuentra estable y afortunadamente solo se lamenta el final
de su participación en los Juegos Odesur 2014.
Cuando ya se ha desarrollado la mitad de la competencia, Chile se ubica en
un quinto puesto, que podría mantenerse hasta el final de la misma. Dura tarea
será superar a Colombia y una misión algo titánica a Venezuela, países que
entendieron la importancia del deporte hace más de 20 años. No obstante, faltan
cuatro días de competencia y la última palabra no está dicha.
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