jueves, 6 de febrero de 2014

Soñar es tan barato




“¡Chile es fuerte, peligroso y extraordinario!” Aunque usted no lo crea, esto salió de boca de Zinedine Zidane. También de Fernando Hierro y últimamente del mismísimo Pelé.
Es cierto, no lo dice cualquiera, lo dicen leyendas del fútbol mundial. Pero aun así, no les deberíamos prestar mucha atención. ¿Por qué?, dirá usted. Porque no estamos acostumbrados a tanta pérgola y porque el traje de favoritos nunca nos ha quedado a la medida.
¿Podemos hacer algo grande en Brasil 2014? Sí, pero antes venzamos a australianos, españoles, holandeses y así sucesivamente. Los mundiales no se ganan con el cartel de favorito, se consiguen partido a partido. Y si no, que lo digan los pragmáticos italianos, alemanes y hasta los españoles en algunos pasajes del mundial pasado.
¿Se acuerda que en Inglaterra ´66 aterrizamos como terceros del mundo y terminamos eliminados en la primera vuelta? En Alemania ’74 íbamos con lo históricamente más granado de nuestro fútbol y tampoco sobrevivimos a la ronda inicial. El bochorno en España ’82 fue total, y con el excelentísimo Marcelo Bielsa en Sudáfrica 2010 nos alcanzó únicamente para la segunda ronda.
Entre medio de tantas loas, es admirable cómo el discurso de Jorge Sampaoli se mantiene cauto e incólume. Sin embargo, es sabido que para el casildense no existen las utopías y los imposibles. Si en algún momento no lo fue la Copa Sudamericana o llegar a la Selección Chilena, ¿por qué tendría que serlo la Copa del Mundo?
Hay que ir con calma, pero dicen que cuando el río suena es porque piedras trae, y por estos días los seleccionados chilenos están metiendo harto ruido en el orbe futbolístico. Alexis Sánchez está ahí entre los goleadores top ten de Europa, Arturo Vidal deslumbra cada día con su fútbol y va por el tricampeonato con la Juventus, Claudio Bravo es sondeado por el Barcelona y recibe elogios de Gerardo Martino,  Eduardo Vargas recientemente se unió al Valencia de Pizzi, Nicolás Castillo al Brujas de Bélgica y Jorge Valdivia volvió en gloria y majestad al gol en Brasil. Charles Aránguiz aprobó en su debut en Internacional de Porto Alegre y Eugenio Mena en su estilo calladito la está rompiendo en el Santos de Pelé. Súmele a esto el hallazgo de Miiko Albornoz, los goles de Pablo Hernández y el buen momento de Esteban Paredes y de Gonzalo Fierro en el torneo local.
El Mundial de Brasil empieza el 12 de junio, son 32 selecciones clasificadas para solamente una copa. Chile nunca la ha ganado y esta podría ser la ocasión. ¿Soñemos? Total, soñar es tan barato.