jueves, 14 de enero de 2016

“Hubo un tiempo que fue hermoso…”



Pucha ¡qué lata todo lo que está pasando con don Sampa! Me cuesta asociar al entrenador exitoso con el personaje que declara equivocadamente y al borde del ataque de nervios. El casildense  ha sido “rehén” de sus propias palabras y por eso el medio y los habitantes  de las redes sociales se lo quieren comer con papas fritas. No hay más vuelta que darle, el hombre quiere escapar y por eso la ANFP debe buscar la mejor salida y pactar cuanto antes el recibo del pago -aunque sea en chirlitos- de la famosa cláusula.
Muchos dicen que la generación dorada  juega  hasta sin técnico, pero yo creo que no es así. Y si es así, esta podría ser una muy buena oportunidad para saber si asimilamos el juego vertical o si la raíz del  fútbol chileno es definitivamente el pase para el lado. En su reemplazo se habla de Marcelo Bielsa, Manuel Pellegrini y Eduardo Berizzo, pero todos ellos ahora están lejos de este momento gris de la selección chilena. El rosarino, con un kilitos de menos, anda flirteando con el Gremio de Brasil, y los otros dos candidatos estarían disponibles a mitad de año, al finalizar sus respectivos campeonatos en Europa. En estado de emergencia y para los partidos de marzo, se  levanta el nombre de Jorge Pellicer y del mismísimo Arturo Salah.
Me da lata todo esto que pasa con don Sampa, pero más lata me da esa gente que lo insulta y que lo escupe en el aeropuerto. Menuda forma tenemos de protestar los chilenos, dándole al puch in ball del momento que levantan los medios. Sí, Sampaoli metió la pata, pero en ningún caso debe ser carne de cañón para que otros sinvergüenzas sigan pasando colados. No mostremos lo peor de lo nuestro y acordémonos de que este mismo técnico nos brindó el logro más importante de la historia del fútbol chileno.
Lo cierto es que no hay tregua en este tira y afloja, porque el entrenador argentino se resiste a pagar la indemnización acordada y porque la ANFP tampoco claudicará en el cumplimiento del contrato. Súmele a esto la cancelación del partido amistoso frente a Panamá en febrero, el castigo de cuatro fechas a Jorge Valdivia y de dos fechas a Eduardo Vargas por los incidentes en Uruguay. Asimismo, la suspensión por acumulación de tarjetas amarillas de Arturo Vidal y las bajas por lesión de Marcelo Díaz, Carlos Carmona y Charles Aránguiz. A Sampaoli le gusta el rock, el grupo Los Callejeros, pero también le debe gustar Sui Géneris y un tema que dice que: “Hubo un tiempo que fue hermoso…”