viernes, 19 de octubre de 2012

The long and winding road - (El largo y tortuoso camino a Brasil 2014)



Cuando ya tenía un pie y medio en la repitencia, les prometía a mis padres las mejores calificaciones del año. Con tres derrotas al hilo y con casi los dos pies afuera del Mundial, la “Roja” promete recuperar el buen  juego y un futuro esplendor para Claudio Borghi.

Es cierto: se corrió, se guapeó y se jugó bonito ante Argentina, ¡pero se perdió! La selección sacó aplausos, ¡claro! ¿Pero los colores patrios acaso no suponen matarse en la cancha? ¡Los metimos en su propio arco y les jugamos de igual a igual! ¿Pero los partidos acaso no se ganan con goles?

Lamentablemente, al “Bichi” se le está acabando el saldo en la selección. La falta de liderazgo, la tozudez táctica, la tirantez con la prensa, el fracaso en la Copa América y los consecutivos tropiezos en las clasificatorias ya le comienzan a pasar a la cuenta.

Por ahora, el oriundo de Castelar no dimitirá de su cargo y la ANFP “respaldará” su gestión hasta nuevo aviso. El receso hasta marzo de 2013 comprendería un segundo aire y una enmienda a todos los hierros de la primera rueda. No hay tiempo para lamentos de cara a la fecha doble que enfrentará a la selección nacional con Perú en Lima y con Uruguay en Santiago. Acuérdese que los del Rímac se juegan la vida en cada clásico del Pacífico y a los “charrúas” -tal como la publicidad- hay que matarlos bien muertos.

En la segunda vuelta de las clasificatorias, la “Roja” tendrá que salir a buscar  todos los partidos para lograr su peak de rendimiento. En la contienda tendrán que demostrar su jerarquía los Alexis Sánchez, los Gary Medel, los Matías Fernández y los Arturo Vidal.

De cara a la abismante falta de gol, el estratego nacional tendrá que dejar los afectos a un lado para darles una oportunidad a los goleadores: Ángelo Henríquez, Esteban Paredes, Carlos Muñoz y Felipe Flores. Borghi también tendrá que flexibilizar su croquis táctico y su inamovible línea de tres, las estrepitosas caídas como forastero dejaron un saldo de 18 goles en contra.
 
Los problemas son oportunidades y vaya qué oportunidad tiene la Selección para inscribirse en la historia y clasificar a un Mundial por segunda vez consecutiva en formato de todos contra todos.

Serrat dice en una de sus canciones que son bienaventurados los que alcanzan la cima porque el camino será cuesta abajo. Esperemos que esta cuesta no se incline más abajo del puesto de repechaje y que este camino  no sea largo y tortuoso rumbo a Brasil 2014.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario